Un total de 21 representantes de la jurisdicción del Servicio de Salud Talcahuano (SST) recibieron la certificación que acredita su participación y cumplimiento de los requisitos para aprobar la tercera versión de la “Escuela de Dirigentes y Dirigentas en Salud”, que fue ejecutada por la Unidad de Asistencia Técnica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Concepción.
El objetivo de este proyecto fue sensibilizar a los participantes sobre la relevancia de la participación social como elemento transversal para una gestión local exitosa. Para cumplir con lo señalado, se fortalecieron las competencias de los participantes para promover procesos participativos en sus organizaciones y territorios, mediante la entrega de herramientas conceptuales, metodológicas e instrumentales.
“Nosotros creemos y apostamos que esta escuela, a pesar de ser un espacio de formación acotada, de todas formas contribuye a que los y las dirigentes puedan desarrollar mejor su rol de acompañamiento, de fiscalización y su rol propositivo en los distintos establecimientos y organizaciones en las que trabajan. Este tipo de instancias son muy importantes, ya que se vinculan a nuestra convicción de que es necesario mejorar la democracia y el ejercicio por el derecho a la salud en nuestro país”, expresó la Dra. Cecilia Bustos, Vicedecana de la Facultad de Ciencias Sociales y coordinadora de la Escuela.
En tanto, Mauricio Jara, director del Servicio de Salud de Talcahuano, valoró positivamente la realización de esta iniciativa y, además, distinguió el esfuerzo de los dirigentes egresados que durante dos meses se capacitaron en dependencias de la UdeC.
“Como red del Servicio de Salud de Talcahuano quisimos empoderar a nuestros dirigentes en conocimientos de distintos aspectos de la gestión de salud, porque estamos convencidos que teniendo estas herramientas podrán ejercer mejor sus derechos y su labor como representantes de la comunidad. Esto es algo destacable, ya que nuestros dirigentes durante un par de meses les quitaron tiempo a sus familias y se esforzaron por cumplir con todas las horas de clases exigidas en el programa. Fue un gran trabajo y que seguramente nos entregará buenos resultados a futuro”, recalcó.
En representación de los 21 homenajeados, Rosa Rocha, dirigente del Comité de Usuarios del Cesfam Lirquén, reconoció que “esta experiencia me enriqueció mucho como persona, así que valió la pena el sacrificio. Mi familia está muy orgullosa de mí porque es un gran logro en mi vida. Yo sólo cursé la enseñanza básica y, de repente, tuve la oportunidad de tomar un curso a la universidad. Eso es impagable y por eso agradezco la confianza que tuvo el CESFAM de mandarme a esta capacitación. También agradezco a la agrupación «Manos Creativas», a la cual tengo el gusto de representar y donde seguiré colaborando con mis nuevos conocimientos para seguir ayudando a personas con problemas de depresión”.