Con motivo del triste fallecimiento de Humberto Maturana
Su partida significa para el país, las universidades y su familia, una gran pérdida. Fue un brillante intelectual chileno que hizo grandes aportes a la teoría del conocimiento y al significado de las emociones y del amor humano. Un profundo humanista, de visión ínter y transdisciplinaria. Autor del concepto autopoiesis. Traducido a muchos idiomas. Profundizador del sentido de la vida, la importancia del lenguaje y la reflexión. Para él la vida se alimenta de las emociones y se construye en la Conversación, en los relatos humanos: la vida se teje en la vida cotidiana, donde nos socializamos desde niños/as, donde aprendemos valores, culturas, normas, comportamientos y modos de ser que marcan la trayectoria personal. No olvidar el Árbol del Conocimiento, escrito con Francisco Varela (que partió muy joven) y la Belleza de Pensar. Muchas de sus sabidurías las necesita hoy la Humanidad y nosotros, para enfrentar las crisis, incluida la sanitaria y encontrar un nuevo sentido eco-humano a la vida. Maturana seguirá viviendo en nosotros y las nuevas generaciones.