Jorge Rojas: «Debemos ser la mejor universidad de Chile»

foto3Fuente: Diario El Sur

«Quiero oficializar mi aspiración de ser el rector de la Universidad de Concepción», dice el actual decano de la Facultad de Ciencias Sociales de esa casa de estudios, Jorge Rojas Hernández. Así se transforma en el primer candidato que ha asumido públicamente su deseo de competir en las elecciones de marzo próximo. 

Asegura que esta decisión surgió «desde hace algún tiempo, por algunas motivaciones de académicos de otras facultades, que han venido observando mi gestión».

Rojas es magíster Artium en Sociología y Ciencias Políticas, y doctor en Sociología de la Universidad de Hannover, en Alemania. El año entrante cumplirá dos décadas como docente en la Universidad de Concepción.

Para declararse como candidato ha tenido muchas conversaciones previas —formales e informales— con académicos de diferentes carreras y facultades, «porque uno tampoco es un aventurero, en el sentido de lanzarse así no más, porque uno tiene los deseos. Yo creo que esta idea creció por la gestión y por el reconocimiento de que uno tiene ideas que corresponden a las necesidades y desafíos de las universidades», explica Jorge Rojas.

Aclara que, desde su ingreso a la Universidad en 1994, ha tenido una constante interacción con los académicos, trabajando en Ciencias Sociales, Educación y Medicina, por lo que conoce cuáles son las principales necesidades que hoy tiene la UdeC.

 

Autoridad horizontal

Jorge Rojas nació en La Cruz, en la Región de Valparaíso, pero a temprana edad su familia se trasladó a Valparaíso y Viña del Mar, donde transcurrió su infancia y juventud. Comenzó a estudiar          Derecho en la Universidad Católica de Valparaíso, pero pronto se cambió al Instituto de Filosofía de donde egresó en 1973. El 11 de septiembre ese año, tras el golpe de Estado, se trasladó a Alemania.

Allí vivió 20 años, entre estudios y trabajos académicos. Cuando volvió a Chile, fue contratado por la Universidad de Concepción como profesor titular en el Departamento de Sociología. Y desde zoo8, es decano de la facultad. Ahora, pretende dar un paso más, ocupando el puesto que hoy tiene Sergio Lavanchy Merino, como rector de la UdeC.

— ¿Cuáles son los aspectos fundamentales que usted mejoraría en su gestión como rector?

—Hay muchas cosas que mejorar a partir de lo que es actualmente la UdeC, con su larga tradición de ser democrática, laica, humanista, republicana, de haber hecho una gran contribución al desarrollo de la comunidad regional y de tener una preocupación por sus académicos y personal administrativo. Sin embargo, hay una cantidad importante de desafíos que se presentan en las universidades chilenas y ésos tienen que ver con los cambios que está enfrentando el mundo y la comunidad en general. Esos desafíos tienen que ver con que ya no estamos viviendo en una era industrial donde se formaba en una perspectiva monodisciplinaria, donde los problemas dependían de los requerimientos de la industria. Hoy, Chile es un país emergente y tiene enormes posibilidades de pasar al desarrollo, pero su gran problema es la mala educación. Faltan más avances de tipo cualitativo, y, en ellos, las universidades pueden hacer aportes enormes. La Universidad juega un papel primordial, debe hacer un aporte fundamental a estos desafíos del país y la Región.

 

—La semana pasada se realizó la iniciativa UdeC100, que pretendía entregar ideas para continuar y mejorar la gestión de la Universidad para llegar a los 100 años de existencia, ¿participó de esta instancia y qué le pareció esta idea?

—No soy miembro del grupo, pero sí valoro la iniciativa. Fui a escuchar los resultados de las comisiones que han estado trabajando en los últimos meses. Ellos hacen un aporte importante a la discusión, lo que es muy bueno que hayan comenzado a discutir, porque eso es algo que falta en esta Universidad, que haya más interacción entre los académicos y las autoridades.

 

— ¿Mejorar la interacción entre los académicos y las autoridades de la Universidad es algo que también realizaría en su gestión?

-Ese será un punto central. Quizá el punto más importante tendrá que ver con una gestión horizontal. En la época industrial, la universidad era más verticalista, las cosas se decidían desde arriba, unos planifican y otros ejecutan. O sea, las autoridades piensan, planifican, y los académicos ejecutan. Ese es un concepto del siglo XX, y ya está obsoleto. Lo que hoy se requiere es una concepción más horizontal, la autoridad debe tener otra manera de ser, como una autoridad que se construya en una intercomunicación con los académicos y las facultades. Es fundamental que una nueva autoridad realice una gestión muy cercana en comunicación y compromiso con las facultades y académicos. No estoy criticando la forma en cómo se actúa hoy, sino que estoy diciendo que muchas veces nosotros somos víctimas de una cultura que es así. Pero hay que cambiarlo.

 

— ¿En qué ayudaría el que la autoridad se estructure de manera más horizontal?

—Así se discutirían los problemas. Cuando se discuten los problemas, hay más alternativas, y mientras más alternativas hay, para ver cómo mejorar la docencia por ejemplo, los académicos pueden entregar un impulso muy valedero, muy genuino a lo que serían las exigencias de la formación profesional que debe estar constantemente en cambio. Lo mismo en investigación. La UdeC tiene muchos investigadores y se destaca porque gana muchos proyectos. Hay algunas universidades en que se produce una polarización entre investigadores que están más preocupados de producir para indexar sus productos en revistas, y aquellos que buscan aportar al desarrollo con su investigación. En los países desarrollados no hay una contradicción entre ser un gran investigador, que publica en revistas indexadas y que es citado por otros investigadores, y el desarrollo para la sociedad.

 

— ¿Recibió algún tipo de presión para postular o para no hacerlo al cargo de rector?

—No he recibido ningún tipo de presión y no creo que la vaya a tener tampoco, porque tengo mi reconocimiento en la Universidad. Y creo que es bueno que haya muchos candidatos, para que haya una discusión democrática y se presenten distintas alternativas, creo que eso es muy sano para la convivencia.

 

— ¿Sabe qué otros candidatos hay o si el actual rector Sergio Lavanchy va a postular nuevamente al cargo?

—No lo sé. Hay rumores, pero no tiene sentido hablar de esos rumores, porque no se sabe nada. Aún no es oficial y hay tiempo todavía, porque las elecciones serían en marro de 2014.

 

Estado y educación

Rojas cuenta que el programa que guiará su gestión como el posible nuevo rector, será elaborado tomando en cuenta las opiniones e ideas de quienes trabajan en la Universidad. «Se requiere que un nuevo programa de rectoría surja desde las bases de la universidad. O sea, desde los académicos, de las facultades, de las carreras, de los funcionarios, incluidos los sindicatos, todo el cuerpo vivo. Porque es una comunidad universitaria, que quizá en los últimos tiempos no se ha fortalecido lo suficiente y se requiere fortalecer. Eso se debe hacer activando los actores de la universidad que son muy variados, eso es lo que va a permitir enfrentar mejor los problemas. Porque todas las facultades tienen algún planteamiento.

 

— ¿Cuáles algunos de esos planteamientos son o problemas que hay que resolver?

—Estamos con un problema de saturación, porque ha aumentado considerablemente la cantidad de alumnos y la planta docente se ha mantenido más o menos estable en los últimos años. Eso se siente en la productividad de los profesores, que tienen muchas actividades, docencia, proyectos, investigación. Y ese es un aspecto importante a considerar en una futura gestión: de qué manera aliviar la carga académica, para que eso no afecte la calidad de la docencia.

Otro punto en el que Rojas muestra preocupación es en la relación actual del Estado de Chile con la educación y las universidades. «Es un problema que hemos estado discutiendo en los últimos años, porque se debe resaltar la importancia que tiene la universidad, al producir bienes públicos, con profesionales que tienen un rol en la sociedad o con la creación de hallazgos y tecnología para el bien de todo el país. Y eso aún no ha sido entendido por el Estado. Ha existido una discusión no muy afortunada en el pasado, de la diferencia entre las universidades estatales y las no estatales. Yo creo que, aparte del tema jurídico, desde el punto de vista académico, no debiera haber mayores diferencias entre la Universidad de Chile y la Universidad de Concepción», explica el decano. Sostiene sus palabras en que la UdeC recibe en un 95% a jóvenes que vienen de sectores vulnerables, de escuelas municipales y subvencionadas, «a diferencia de lo que pasa en la Pontificia Universidad Católica y la Universidad de Chile», comenta Rojas.

— ¿Cómo se lograría mejorar esa relación con el Estado y las universidades?

—Una nueva rectoría tendría que conversar y buscar un nuevo trato del Estado en la deuda que tiene con las universidades, que forman profesionales, los sacan de la pobreza y debe endeudarse la universidad, o la familia, o los mismos jóvenes. Eso tendría que ser dialogado con el gobierno y también con el parlamento. Hay muchas confusiones en el Estado chileno con respecto al papel de la Universidad de Concepción y eso lo vamos a arreglar. Vamos a comunicarle los grandes aportes que hace la Universidad a la sociedad y pedir un mejor trato para aliviar el tema de nuestra propia deuda. Porque esos son problemas económicos que debiera resolver el estado. Y Chile tiene recursos para eso.

 

Ser la mejor

«Nosotros debiéramos salir de la discusión de si somos la tercera mejor universidad de Chile, debemos ser la primera universidad de Chile, y esa es una ambición que depende de nosotros. Si queremos ser los terceros, vamos a ser siempre los terceros y vamos a estar contentos con eso», comenta Jorge Rojas.

Para eso, el decano de Ciencias Sociales explica que un punto muy importante es poner énfasis en el pregrado. «En la medida en que ha habido un gran expansión de los pregrados, eso puede impactar la calidad de lo que se imparte. En una nueva gestión el pregrado se debe fortalecer. Hay proyectos de convenios de desempeño, que hemos estado pidiendo que se centren en las facultades, tenemos que priorizar mucho más la formación a las exigencias del mundo del trabajo», comenta el sociólogo.

También, sería necesario, según Rojas, crear una mayor alianza estratégica entre las universidades que se ubican en la Región del Bío Bío, así como hoy está ocurriendo con las de la Región de Valparaíso.

«Y, además, debemos procurar que los otros campus que tenemos, de Chillán y Los Ángeles, tengan la misma importancia que la sede de Concepción», concluye el decano.

Entrevista por Romina Pino Soto// Diario el Sur / Reportajes.

Domingo 27 de octubre 2013

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