Una de las trabajadoras más representativas de la Facultad de Ciencias Sociales ha sido distinguida por su constancia y compromiso con la Universidad de Concepción. Se trata de Lorena Henríquez Silva, secretaria del Decanato, quien este 2020 cumplió 25 años de servicio en la casa de estudios del Campanil.
“Mi vida en la Universidad de Concepción empezó el día en que realicé mi práctica profesional en la unidad de bodega de materiales que pertenecía a la Dirección de Servicios, donde el director era el señor Alejandro Irigoyen y subdirector el señor Franz Dechent. Mi padre, don José Henríquez, también trabajó como auxiliar en la UdeC por más de 47 años. Fue por esa razón que arquitectos, auxiliares y secretarias de esa época me conocían desde muy pequeña”, recordó Henríquez.
Sobre su relación con la Facultad de Ciencias Sociales, la funcionaria detalló que “estudié Secretariado Ejecutivo con mención en Computación por dos años y medio. Una vez terminado este desafío, comencé a hacer reemplazos en distintas reparticiones y unidades de la UdeC con excelentes cartas de recomendación. Así estuve hasta 1996, cuando fui contratada como secretaria de planta en la recientemente creada Facultad de Ciencias Sociales, la cual estaba compuesta por cuatro carreras (Sociología, Trabajo Social, Psicología y Periodismo) y era dirigida por la Decana Olga Mora Mardones, a quien siempre recuerdo con mucho cariño. Fue así como comenzó mi carrera administrativa en la Universidad de Concepción con mucha energía y proyección. Primero trabajé en la oficina de Secretaría Académica, luego en el Vicedecanato y desde el año 2005 como secretaria del Decanato de la Facultad de Ciencias Sociales, donde ya llevo 15 años de labor ininterrumpida”.
Para Lorena, trabajar en la UdeC no sólo ha sido significativo por la posibilidad de continuar con el legado de su padre, sino que también le ha permitido constituir su propio proyecto familiar. “Acá en la Universidad de Concepción formé mi familia, ya que conocí a mi esposo, el Dr. Antonio Buljän Hernández, quien se desempeña como académico y director del Departamento de Físico Química de la Facultad de Ciencias Químicas. Con él tenemos dos hijos: Montserrat, de 18 años, quien es estudiante de primer año de la Facultad de Ingeniería, y Esteban, de 13 años. Acá en la UdeC también trabaja mi hermano y estudia mi sobrino, Franco Henríquez, quien actualmente cursa su penúltimo año de la carrera de Ingeniería Civil Eléctrica. Se puede decir que somos una familia universitaria”, recalcó.
Por último, Henríquez realizó una interesante reflexión sobre su paso por la universidad. “Estos 25 años han sido muy importantes para mí. El cariño y compromiso por la UdeC han ido creando lazos con quienes compartimos el trabajo diario, espero tener vida y salud para seguir trabajando, para seguir perfeccionándome cada año y para seguir creciendo profesionalmente, para así contribuir a hacer más fuertes los cimientos de nuestra institución, que hoy es patrimonio nacional y, además, se alza con propiedad como líder a nivel latinoamericano. Y por estos 25 años y más como trabajadora en la UdeC, sólo me queda mencionar la parte que me ha permitido crecer como persona y profesional: ¡por el desarrollo libre del espíritu!”, sentenció Lorena.