En el auditorio Universidad de Concepción y ante una masiva cantidad de asistentes se efectuó la ceremonia de cierre de la cuarta versión de la “Escuela de Dirigentes y Dirigentas en Salud”, la emblemática iniciativa financiada por el Servicio de Salud de Talcahuano y ejecutada por el Departamento de Trabajo Social de la Universidad de Concepción.
En esta oportunidad, se entregaron certificados de aprobación a un total de 28 representantes de las comunas de Talcahuano, Hualpén, Penco-Lirquén y Tomé, quienes durante seis semanas recibieron diversas herramientas conceptuales, metodológicas e instrumentales para entender la salud desde un enfoque en derechos humanos y fortalecer sus competencias en la promoción de procesos participativos en sus organizaciones.
“Esta escuela se desarrolla desde hace cuatro años y surgió de la necesidad de los dirigentes sociales de capacitarse de una manera efectiva y conseguir herramientas para empoderarse y realizar fiscalizaciones sociales como corresponde. Somos nosotros los dirigentes sociales quienes hemos decidimos los temas que queremos aprender cada año y los proponemos directamente a la Universidad, que es representada por la profesora Cecilia Bustos (…) Este año detectamos la necesidad de capacitarnos en el derecho a la salud, habilidades y rol del dirigente, participación social, entre otros temas importantes. Además, en esta versión pudimos contar con la participación de dirigentes de postas rurales, así que nuestro aporte también podrá llegar a más localidades”, indicó Carlos Palacios, presidente del Consejo de Participación Social en Salud del SST.
La Dra. Cecilia Bustos, docente del Departamento de Trabajo Social y coordinadora del proyecto, también entregó un positivo balance de esta cuarta edición y detalló que “este año trabajamos con más premura en términos del calendario de la escuela, que incluye una actividad práctica como exigencia necesaria para la certificación. Sin embargo, todo resultó bien y nuestros dirigentes y dirigentas pudieron cursar sin problemas cinco módulos de formación y, posteriormente, planificar y desarrollar con éxito una actividad comunitaria de réplica en sus comunidades de base”.
Respecto a las particularidades de esta nueva “Escuela de Dirigentes y Dirigentas en Salud”, la docente reveló que “este año conformamos un equipo sólo con docentes del Departamento de Trabajo Social. Tuvimos la oportunidad de contar con la profesora Cecilia Pérez Díaz y con la profesora Claudia Quiroga, quienes no habían estado en los años anteriores y que tienen una trayectoria importante que compartir. También se incorporó la profesora Carla Vidal, quien no sólo trabajó como docente, sino que también tuvo un rol fundamental en la coordinación de la Escuela. Ella tuvo el respaldo de dos profesionales de apoyo, Belén Castillo y Hugo Silva, ambos Trabajadores Sociales egresados de nuestra Universidad. En ese sentido, creo que el trabajo en equipo que realizamos en la docencia y coordinación nos deja conformes y con la sensación de que el Departamento de Trabajo Social tiene una planta consolidada y con gran potencialidad para desarrollar diversas propuestas de asistencia técnica en el futuro”.